Si os faltaba alguna razón para motivar a vuestro/a hijo/a a hacer ejercicio físico la encontrarás aquí. Desde los griegos ( recogida la famosa cita en Sátira X, 356 ) sabemos y reconocemos que el ejercicio físico mejora la formación física, la autoestima, potencia los valores sociales y la relación con el entorno a la vez que es una actividad divertida.
El Gabinete Zana apuesta por que los niño-as y adolescentes practiquen un deporte no solamente por lo anteriormente mencionado sino como parte de la terapia y reeducación de aquellos/as que presentan dificultades en el aprendizaje de la lecto-escritura, discalculia, problemas de lateralidad, déficit de atención y/o hiperactividad, dificultad en el desarrollo de sus habilidades sociales, etc.
Si todos los especialista en aprendizaje sabemos que la Disgrafía ( trastorno específico de la escritura) está íntimamente relacionada con problemas de lateralidad, retraso motor, deficiente de algunas habilidades psicomotrices (coordinación ojo mano, percepción y orientación espacial) , la práctica deportiva no será un excelente aliado para mejorarla? De la misma forma que en la Discalculia ( dificultades para el aprendizaje de las matemáticas ) existen problemas para comprender conceptos de tipo espacial y temporal, y algunos deportes desarrollan la orientación espacial. Ni que decir de los niños/as TDAH los beneficios del ejercicio físico al ayudarles a descargar su gran energía, concentrarse y a programar las funciones ejecutivas (atención, planificación motora y cognitiva, etc).
Aprovechar los fines de semana para salir en familia a montar en bici, patinar, combinándolo con la práctica deportiva en el colegio ( actividades extraescolares ) es una buena alternativa. Pero siempre atendiendo a la edad y la maduración física y funcional del niño/a, evitando que estas actividades sean una fuente de sobrepresión para el niño-a o causen una baja autoestima (a veces el deporte es demasiado competitivo y exigente y no cumple sus objetivos principales que deberían ser la cooperación, trabajo en equipo, el desarrollo físico y cerebral, etc) . Lo importante es que vuestros hijos puedan desarrollar ciertas habilidades que el entorno escolar demanda de forma lúdica y en un entorno libre de presión. Porque no hay nada mejor que APRENDER DIVIRTIÉNDOSE y muchos niño-as con Dificultades de Aprendizaje tienen otras capacidades o inteligencias que el colegio no estimula como la Inteligencia Corporal o kinestésica, la interpersonal… que el deporte estimula.
Un artículo de nuestra logopeda: Soledad Bejarano